Imagínate que estás sentado en un restaurante disfrutando un almuerzo. De pronto una atractiva mujer se sienta en otra mesa a unos cuantos metros de ti. Sacas tu teléfono móvil y sin que se la mujer lo note le tomas una foto. En pocos segundos aparecerá en la pantalla de tu móvil el nombre de la mujer, su dirección, y un enlace hacia su cuenta de Facebook donde podrás hacerle un pedido para convertirse en tu amiga. Además podrás saber si la mujer es soltera y está buscando establecer una relación romántica en uno de esos sitio de citas por Internet.¿Ficción o realidad?
De hecho, la tecnología existe y ha sido desarrollada ¿por quién más? ¡Google! Recientemente el presidente de Google, Eric Schmidt admitió que la compañía ya posee este tipo de tecnología, sin embargo ha dicho que no piensan hacerla pública hasta que no logren poner límites que protejan a los usuarios del abuso que puede acarrear este tipo de sistemas.
Pero según Alessandro Acquisti, un investigador de la Universidad de Carnegie Mellon es ya demasiado tarde para prevenir cualquier abuso con los sistemas de reconocimiento facial. Utilizando un software de reconocimiento de imágenes que se vende libremente, y creando un simple programa para que minara los datos públicos de Google, Facebook, los sitios de citas románticas en línea y otras redes sociales, Alessandro y su grupo de investigadores realizaron un estudio donde voluntarios accedían a que le tomaran su foto para luego tratar de parearla con la información pública disponible. En menos de 15 horas su sistema descubrió que uno de cada diez de los voluntarios que aceptaron que se les tomara la fotos habían creado una cuenta en un sitio de citas en línea (los voluntarios eran estudiantes de universidad, así que el porcentaje de solteros(as) era relativamente alto). Además, el grupo logró adquirir información personal hurgando en los perfiles de Facebook, y otras redes sociales, hasta llegar el punto que lograron identificar positivamente un 30% de los voluntarios, incluyendo sus nombres y direcciones. Para rematar, los investigadores desarrollaron una aplicación para los teléfonos móviles que refinaba la técnica usada y lograba obtener resultados similares en cuestión de minutos.
Eventualmente, con solo tomar una foto con su móvil, lograban determinaban el nombre de la persona, su dirección, las amistades del individuo y sus hobbies. Además sabía si era miembro de algún sitio de citas por Internet.
Aparentemente Google comenzó a trabajar en un sistema similar (aunque mucho más sofisticado) al que desarrollaron los investigadores en el 2006, cuando el gigante de la Internet adquirió Neven Vision, una compañía que había desarrollado un software de reconocimiento de imágenes. En Julio de este año, Google también adquirió PittPatt, otra compañía que se especializaba en reconocimiento facial mediante fotos.
Unos meses atrás el sitio de noticias CNN dijo que Google ya estaba desarrollando una versión móvil de este sistema, aunque el reporte inicial decía que los usuarios debían aceptar compartir la información en sus perfiles antes de que pudieran utilizarla.
Con los usuarios de Facebook y otras redes sociales subiendo millones de fotos que son etiquetadas con el nombre de las personas, es solo cuestión de tiempo antes de que Google o cualquier otra compañía finalmente comience utilizar estos sistema de reconocimientos faciales. Las repercusiones podrían ser enormes, desde los cuerpos de la ley utilizándola para identificar criminales, hasta los criminales usándolas para identificar posibles víctimas. Sea cual sea el uso, no cabe duda de que será un asalto frontal a la privacidad de todos nosotros.
